No tengo palabras al ver el nuevo edificio con que Calatrava nos castiga. Esta vez ha sido en Oviedo y el resultado es el que podéis ver en la siguiente foto y en un articulo más detallado en El economista.
Y como no, el presupuesto inicial 76 millones de euros y parece que ha acabado costando más de 360 millones. Empiezo a sospechar que este arquitecto lo hace para reírse de los políticos que le contratan estas monstruosidades; razón, desde luego, no le faltan. ¿Qué político habrá autorizado esta indescriptible obra?