martes, 21 de junio de 2011

La selectividad

Durante estas fechas, miles de estudiantes se juegan parte de su futuro en un conjunto de exámenes de diversas materias que todos conocemos como selectividad.

En este tipo de prueba, no importa que vayas a estudiar ingeniería aeronáutica, naval o informática: tienes un examen de filosofía, literatura o lengua (que ya las aprobaste en bachiller, por cierto). Tampoco importa si tu ilusión es estudiar periodismo, filología o historia del arte: te vas a examinar de matemáticas, biología y otras materias similares.

Y en eso te juegas el poder o no acceder a aquellos para lo que piensas que estás más preparado (que suele coincidir con aquello para lo que realmente estás más capacitado).

¿Hasta cuando este absurdo?

Mis propuestas son las siguientes:

1. Diversificación desde los 14 (como estaba antes, al finalizar la "EGB"). A esa edad, uno ya sabe si sirve o no para seguir profundizando en el estudio o si va a ser el más eficiente de los fontaneros (que hasta hace poco cobraban más que un ingeniero).

2. Para evitar discriminar a la formación profesional, los institutos de secundaria (14 años en adelante) deben ser comunes para secundaria "bachiller" y para secundaria "profesional". No tienes porqué dejar a tus amigos por el hecho de que tu estudies motores mientras ellos estudian integrales y derivadas. Eso a los 14, 15 y 16 años tiene su importancia y ha provocado que muchos siguieran fracasando en el bachiller con tal de no abandonar a sus amigos.

3. A los 16 años ya tendríamos profesionales preparados durante 2 años (FP) y estudiantes con una formación adicional (por ejemplo para ser contables, auxiliares de clínica o similar). En cualquier caso se pueden incorporar al mercado de trabajo.

4. 17 y 18 años deben suponer el principio de la "carrera" para el ingreso en los estudios universitarios. Es el actual bachiller. Diferenciación temática: Matemáticas (para carreras de Ingeniería), ciencias (para biología, medicina y similares), etc..

5. Examen de ingreso PARA CADA TITULACIÓN y que entren los X mejores donde X es el número de plazas de dicha titulación (grado). Y te puedes presentar año tras año y universidad tras universidad.

6. Un último detalle. Los estudios universitarios (y casi que también el bachiller) deberían ser costeados mediante un "préstamo" que te hace el estado. Este "préstamo" se lo devolverás durante tu vida laboral. Esto pretende impedir que un camarero que trabaja 12 horas en un bar de Benidorm (por ejemplo) le pague 10 o 15 añitos de feliz estancia en la facultad al niñito de papá que no tiene ninguna prisa en terminar.

En fin, que el sistema educativo requiere cambios. Lástima que nuestros políticos sean los primeros que también necesitan un cambio.

viernes, 3 de junio de 2011

Sánchez Manzano ascendido

Para los (pocos) interesados en los sucesos del 11 de marzo de 2004 en los cuales fueron asesinadas unas 200 personas y más de mil heridos y mutilados, pongo en vuestro conocimiento que el "famoso" comisario Sanchez Manzano (entonces jefe de los tedax) ha sido ascendido por el presidente "de facto", ministro del interior y candidato a presidente "de jure" Alfredo Pérez Rubalcaba.

Para los profanos en la materia y dado que no lo vais a ver en ninguna televisión ni medio de comunicación de masas os informo de que existe juicio abierto contra este hombre por delitos de encubrimiento, omisión del deber de perseguir delitos y falso testimonio en relación con la desaparición y destrucción de pruebas en dicho atentado.

Esta siendo acusado por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M, la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión de Oficiales de la Guardia Civil (UO). ¡Hasta el fiscal rechazó en su momento archivar el caso por lo claras que son las evidencias de delito de destrucción de pruebas!.

Lo del faisán es una juego de niños en comparación con este caso. Lo que me aterra es pensar en lo que habrá detrás ya que ni los grandes medios de comunicación (salvo "el mundo") ni los políticos hacen caso alguno a este caso.